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Cuando nos enfrentamos a un problema en el que hay que averiguar el valor de una magnitud dadas otras, es frecuente que nos proporcionen una fórmula que las relaciona (si no nos la proporcionan es porque debemos conocerla). 

Se nos pueden dar dos casos:

• En la fórmula ya está despejada (solita en el primer miembro) la magnitud que queremos calcular: ¡Opción preferida! ya que solo hay que sustituir los valores del resto de magnitudes y calcular.
• En la fórmula no está despejada la magnitud que queremos averiguar: en este caso podemos sustituir los valores que nos proporcionan y despejar la incógnita (o viceversa, despejar y luego sustituir).

¡Cuidado al despejar! Es donde se cometen más errores. Debes saber que hay que seguir un orden, y que también hemos de tener en cuenta el grado de la ecuación que nos resulta una vez sustituidos los valores.

Aquí te dejo 3 vídeos con problemas diferentes en los que se trata de despejar magnitudes: